El hombre en el poder

El presidente Snow es uno de los personajes importantes de la trilogía literaria y cinematográfica Los Juegos del Hambre. Los eventos tienen lugar allí en un futuro más o menos lejano en Panem, el país construido sobre lo que hoy conocemos como Estados Unidos. Panem es un país gobernado de manera muy autoritaria desde el Capitolio. Setenta y cinco años antes de los eventos del primer libro, sus 13 distritos se rebelaron, pero fracasaron. El decimotercer distrito fue borrado del mapa y se creó una tradición para recordar al pueblo el poder del Capitolio sobre el pueblo. Cada año, dos jóvenes de entre 12 y 18 años son elegidos de cada uno de los doce distritos de Panem y luchan a muerte en una arena, siendo el último superviviente coronado Gran Campeón. El presidente Snow es el líder de este país. Desde la primera parte de la trilogía no tolera el espíritu rebelde de Katniss, la competidora del distrito 12. De hecho, éste se arregló para que ella y Peeta, el otro competidor del distrito 12, pudieran sobrevivir los dos. Desde el segundo libro, Katniss sembró las semillas de la revuelta, hará todo lo posible para asegurarse de que ella muera.

El hombre de la rosa

El presidente Snow se muestra aquí como se ve en una de las escenas de la segunda película: Catching Fire. Cuando Peeta y Katniss toman su Champions Tour, el presidente Snow les da la bienvenida al Capitolio con una copa de champán. Como casi siempre, su atuendo es en tonos rojos, aquí burdeos. También encontramos los detalles de su traje como la solapa negra de su chaqueta o guantes, así como la rosa blanca, su símbolo, colgando de su cuello. A la altura de la cabeza, encontramos su barba blanca corta y bien arreglada así como su pelo blanco siempre peinado hacia atrás. Su rostro es bastante simple, pero Funko no ha olvidado sus espesas cejas blancas representadas en relieve y colocadas de tal manera que le dan una mirada amenazante. También notaremos la presencia de arrugas debajo de los ojos para dar una idea de su edad y el hecho de que muy a menudo se ve mal. Por último, sostiene una copa de champán en la mano derecha.